El proceso de certificación al que se someten los candidatos representa un sistema de medida y puesta a punto para la formación y el desarrollo profesional de los Directores de Proyecto lo que facilita el trabajo de administración y desarrollo de RH. La competencia profesional del personal certificado que la compone sirve a la empresa una herramienta de “marketing” para demostrar el empeño organizativo por la excelencia de los servicios ofrecidos en Dirección de Proyectos.